viernes, 27 de marzo de 2015

Calabacín rebozado







Es conocido ya lo mucho que me gusta el calabacín :-) y que mi marido de vez en cuando se planta y dice que ya no come más calabacín en unos dias... Bueno, pues cuando los hago así, hasta él aplaude. ¡Así de ricos quedan! Básicamente son láminas gorditas rebozadas, pero lo bueno es rebozarlas con mucho sabor. Yo uso una mezcla de especias de la que ya os he hablado antes, que se llama italian seasoning, si no lo tenéis para añadirlo al pan rallado, simplemente probad echando cualquier combinación de hierbas y especias que os gusten, el orégano, el pimentón, el romero, el ajo en polvo.... Todo le puede ir bien. Y echad sin miedo, un par de cucharadas grandes en una taza de pan rallado apenas se nota, mejor echar de más que quedarse corto.

Aquí los veis nada más hacerlos acompañando un sandwich de atún muy rico que se llama tuna melt, porque va derretido, es atún de lata mezclado con mayonesa, y normalmente lleva queso y tomate, yo le puse además bastante aguacate espachurradito en una parte. Tenéis la receta aquí.

¿Sabíais que 100gr de calabacín tiene casi el 30% de la CDR de vitamina C? Pues ya lo sabéis :-)

Tiempo: 10mins prep.    40 horno                                         Raciones: 4 guarniciones

Ingredientes:
4 calabacines pequeños y gorditos
1 taza de pan rallado
2 cucharadas colmadas de italian seasoning, o hierbas y especias al gusto
1 huevo
aceite


este es mi bote de especias italianas :)


1. Precalentamos el horno a 220ºC. Cortamos el calabacín en tiras gorditas, como de 1cm de grosor. En un cuenco batimos el huevo con un poquito de agua. En un plato hondo ponemos el pan rallado y mezclamos en él las especias.

2. Engrasamos (con un spray es ideal) una bandeja de horno ligeramente, y vamos pasando los trozos de calabacín por el huevo y después por el pan, colocándolos en la bandeja, separados entre sí para que se doren bien. Lo horneamos durante unos 40 minutos hasta que estén bien doraditos y a disfrutar.



Arroz con leche en la slow cooker

Me estoy atreviendo a hacer cositas distintas en mi slow cooker últimamente, y los resultados son siempre buenos, así que aquí comparto el arroz con leche que hice hace un par de días. Todo empezó porque alguien en mi grupo de Facebook de recetas para slow cooker preguntó por tortilla de patata en la slow cooker (esa olla lenta que me vuelve loca y de la que he hablado mil veces, y para la que podeis encontrar varias recetas muy recomendables aqui). Después de hablar un poco sobre el huevo y las tortillas, empezamos a hablar del arroz con leche, de cómo lo hacemos cada una, de cómo se hace en distintas partes de España... Yo fui la loca que en pleno calentón cogí mi slow cooker y me puse a hacerlo. Dió la casualidad de que lo tenía todo, nata incluida, aunque no tenía arroz de grano corto como lo suelo hacer y suele ser lo más tradicional. La diferencia entre los arroces en este caso es que los de grano corto (tipo bomba, valenciano, arborio...) sueltan mucho más almidón que el de grano largo, y eso añade a la textura final del postre. Con el grano corto podemos echar más leche, pero como yo lo hacía con el largo, estas son las proporciones que puse y salió muy cremoso y muy espesito. Estaba delicioso de sabor, me ecanta el toquecito dulce de la vainilla. Si usais grano corto os recomiendo poner quizá una taza más de leche, pero mi experimento sirvió para demostrar que con el de grano largo se puede hacer fenomenal, y que se puede hacer en la slow cooker en un periquete.



Hay quienes echan mantequilla, hay quienes echan sólo leche, hay quien no quiere oír de la vainilla en el arroz con leche.... Esta es una receta que básicamente viene de un libro que tengo para hacer polos (se llama Paletas, pues es un libro mexicano y así llaman a los helados de palo), hay recetas muy sofisticadas, entre ellas la de la paleta de arroz con leche, donde tienes que empezar por hacer el arroz con leche. Pues ese arroz con leche es el más rico que he probado. Modifiqué un poquito las cantidades para la slow, y así es como lo hice, os recomiendo probar a poner nata y vainilla alguna vez, sale de vicio.


Tiempo: 2horas en high +1 min de prep.                                          Raciones: 6

Ingredientes:
1 taza de arroz largo
3.5 tazas de leche semi (2%)
1/2 taza de nata de montar (heavy cream)
3/4 taza de azúcar blanco
piel de medio limón
1 ramita de canela
1 cucharadita de vainilla o una vaina (si usamos vaina, la cortamos lo largo abriéndola como un libro, así una vez cocinado podemos raspar lo de dentro con un cuchillo de punta redonda y sacar las semillitas)

1. Ponemos todos los ingredientes en la slow cooker, tapamos, y dejamos cocinar en high durante 2 horas. Cuando volvemos está listo para sacar la canela y el limón y disfrutar!


Así de fácil, así de rico :-)

jueves, 26 de marzo de 2015

Tortellini con crema y espárragos

¿Quién no ha comprado la pasta fresca rellena cuando estaba de oferta y luego no sabía que hacer con ella de inmediato? El otro dia estaban a mitad de precio y no me pude resistir, aqui la pasta seca "normal" cuesta en torno al dolar la cajita de medio kilo (una libra), si es la marca del super pueden ser 88 centavos, si es la marca más conocida pueden ser 1,40, y las que se las dan de artesanas y estupendas pueden llegar a los 4 dólares tranquilamente. La pasta fresca tipo espaguetti cuesta unos $3 el paquetito de dos raciones, pero las rellenas son verdaderamente caras, aunque solo rellenas de queso suelen costar unos $4 dólares o más dependiendo de la marca. Así que claro, si me lo ofrecen a $2, no me resisto... Compré unos que eran como flores rellenos de quesos, que en el momento los cocí y los compartí con el peque con mantequilla y parmesano rallado. Le encantaron. Y congelé un paquetito de medias lunas rellenas de setas y queso. Esperaba tener una idea que le fuera bien, y ha llegado al haber abierto un bote de mi salsa favorita: la salsa alfredo. Ya os he hablado de esta salsa otras veces, es una salsa muy sencilla de hacer, que aquí es perfectamente normal pero que en España no se conoce, se puede hacer con nata, queso y pimienta negra, o se puede substituir por carbonara si nos gusta, es básicamente una crema con queso.



Aquí está la receta que se me ocurrió para usar la salsa que tenía abierta y la pasta fresca que tenía congelada, usando sólo un par de ingredientes más que tenía en la nevera. Bueno, en la nevera no, que ahora siempre se dice que los tomates no se deben meter en la nevera que se les va el sabor, asi que los tomates en el frutero en el mostrador ;-) Los tomates además son muy ricos en licopeno, que hay muchos estudios ahora que lo vinculan a la prevención del cáncer. Espero que sea verdad y que no tengan nada perjudicial porque mi peque se come como 1kg de tomates cherry a la semana fácil. El otro ingrediente son los espárragos que por fin están de temporada, y tienen un poquito de proteína (100gr tienen como el 5% de la proteina diaria recomendada, no es mucho, pero para que veais que las proteínas se esconden en todas partes), tienen también muchas vitaminas y minerales en mayor o menor medida, tienen mucha vitamina K, que es fundamental para la coagulación, tienen ácido fólico, vitamina A, algo de vitamina C, y minerales como el hierro (100gr nos dan el 12% de la CDR). Pues eso, que es fácil, rico, y saludable :-)

Tiempo: 10mins                                                  Raciones: 2 por ser un paquete muy pequeño

Ingredientes:
1 paquete de pasta fresca rellena
1.5 tazas de salsa Alfredo o similar
un buen puñado de tomates cherry cortados a la mitad
un manojito de espárragos verdes (unos 10-12)
parmesano para rallar

1. En una cacerola poner agua a hervir y echamos la pasta en ebullición. La pasta fresca, especialmente la rellena, se sabe que está lista cuando flota. En cuanto lleva unos segunditos toda flotando, la sacamos con una espumadera (mejor que volcar en un escurridor porque se puede abrir).

2. En una sartén grande ponemos agua suficiente para cubrir los espárragos cortados en trozos de unos 3cm. Lo llevamos a ebullición, colocamos los espárragos y dejamos cocer unos 3-4 minutos. Los escurrimos.

3. En una cacerolita (la misma de haber cocido la pasta) vertemos la salsa de queso, incorporamos los espárragos y los tomates. Lo calentamos a fuego medio para que no se pegue, y lo servimos cubriendo la pasta en cada plato. Rallamos quesito por encima y a disfrutar!


miércoles, 25 de marzo de 2015

Pechugas al limón



Una receta totalmente inventada con lo que tenía en la nevera, que seguro que podeis recrear con lo que teneis en la vuestra. Son unas pechuguitas de pollo con un aroma espectacular gracias al limón cortado en rodajas con su piel y todo, y al albahaca fresco. Seguramente le podeis poner tomillo, romero y otras especias, pero el limón es lo que le ha dado un sabor fresco buenísimo, probad a ponerlo así.


Lo acompañé del gratín de patata y calabaza con queso que os compartí hace unos días.

Tiempo: 30-35mins                                        Raciones: 4 (hice dos bandejas de horno, solo se ve una)

Ingredientes:
4 pechugas de pollo
2 limones cortados en rodajas finas
2 tazas de tomates cherry cortados a la mitad
1 puñado de hojas de albahaca frescas
sal, pimienta
aceite de oliva


1. Precalentamos el horno a 220ºC. Calentamos un poquito de aceite en una sartén grande (o dos para poner dos pechugas en cada una al mismo tiempo) a fuego medio y colocamos el pollo en ello y salpimentamos. Tapamos y dejamos cocinar unos 10 minutos, hasta que la parte de abajo esté doradita y la pechuga casi hecha.

2. Pasamos las pechugas a una bandeja de hornear, con la parte dorada hacia abajo, y ponemos por encima las rodajas de limón, las hojas de albahaca y los tomates cherry troceados. Lo horneamos unos 15-20 minutos hasta que el pollo esté bien hecho, dependerá del grosor de las pechugas. Si teneis un termómetro debe marcar unos 75ºC (170F) en su punto más gordito.


Recomiendo servirlo con algo que no tenga mucho sabor, ya que queda muy aromático, y no tengais miedo, comerlo todo junto, los limones con piel se habrán quedado muy cocinados y tendrán un aroma intenso pero delicado, no se parece al sabor del limón en crudo ni el amargor de la piel.

Sandwich BLT (bacon, lechuga y tomate)




Porque no todos los días queremos ni podemos dedicarle tiempo a la cocina, hoy os traigo un sandwich muy americano, el BLT. Este sandwich es un favorito de costa a costa y no admite muchas variaciones, ya que sus ingredientes son tres: Bacon, Lechuga y Tomate, generalmente en pan de molde blanco "normal" y con un poquito de mayonesa. Es algo tan simple y que está tan bueno que os animo a que lo probeis para llevar al trabajo, para una cena rápida... Es de los favoritos de mi marido y me lo estaba pidiendo, asi que los hicimos el otro día acompañados de un sobrecito de pasta la que viene ya con los aderezos listo para cocerlo todo junto en 7-8 minutos.

Aquí va la "receta":

Tiempo: 10mins                                      Raciones: 2 sandwiches

Ingredientes:
4 rebanadas de pan al gusto
4 lonchas de bacon
hojas de lechuga
1 tomate grande
2 cucharadas de mayonesa

1. Nosotros el bacon siempre lo hacemos en el microondas, lo ponemos en un plato con papel de cocina y lo cocinamos un minuto por loncha.

2. Untamos dos rebanadas con mayonesa (una para cada sandwich), ponemos el tomate sobre la mayonesa cortado en rodajas, encima ponemos dos lonchas de bacon, y terminamos con las hojas de lechuga para cerrarlo con la otra rebanada de pan.

¡Así de sencillo! ¡a disfrutar de este clásico! :-)

Ensalada de espárragos verdes

En Facebook sigo una pagina que se llama Skinny Taste, y que tiene muchisimas recetas ricas y saludables. Os aconsejo echarle un vistacillo, está en inglés pero muchas veces sabiendo lo que son los ingredientes clave es fácil imaginarse cómo está preparado -¡o recrearlo a nuestra manera! Algo así he hecho con esta ensalada. Tenia pensado hacer algo con salmón para comer, pero he visto la foto en Facebook y no me lo he pensado dos veces: acababa de comprar espárragos (los primeros de la temporada) y tenia aun vinagreta balsámica con bacon de mi ensalada con espinacas del otro dia. Así que perfecto, he cocido un huevo, he preparado los espárragos y listo! 


Aquí va esta idea ideal para ahora que llega el buen tiempo, para llevar en el tupper o como he hecho yo, para inaugurar la temporada de comer en la terraza. Por fín llevamos unos dias sin nieve (3 dias concretamente) y el sol ha derretido la que habia. Hacía tan bueno hoy que me he quedado un ratito tomando el sol después de comerme toda la ensaladera :-)

Tiempo: 10mins.     Raciones: 2
Ingredientes:
Un manojo de espárragos verdes
1 huevo duro
2 lonchas de bacon crujiente en trocitos
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharada de vinagre de vino tinto o balsámico
1/2 cucharada de mostaza dijon
Sal y pimienta

1. Para preparar los espárragos frescos es mejor emplear un par de minutos chascando los finales uno a uno que cortarlos todos a cuchillo, porque cuando los chascamos de uno en uno el espárrago mismo se va a romper por donde lo necesita, empezamos doblando desde el final y enseguida el espárrago chascará por donde empieza a estar maduro. Asi tiramos menos que está bien y comemos menos que está mal. Después los cortaremos en trozos de unos 4cm de largo.

2. En una cacerola ponemos 3 deditos de agua con sal y llevamos a ebullición, echamos los pedazos de espárragos, bajamos el fuego a medio-bajo, cubrimos y dejamos cocer unos 3-4 minutos. Escurrimos el agua, ponemos un pelín de aceite de oliva y rehogamos un par de minutos. 

3. Retiramos del fuego. Mientras vamos preparando el huevo en trocitos y la vinagreta: en un bowl mezclamos el aceite, el vinagre, la mostaxa, sal y pimienta, añadimos el bacon, removemos bien y reservamos hasta que los espárragos estén listos.

4. Ponemos los espárragos en una ensaladera, y el huevo picado sobre los espárragos. Rociamos con la vinagreta con bacon y servimos templado o frio de la nevera al gusto. 

Yo lo comí templadito y estaba delicioso, tanto que estoy haciendo más espárragos ahora mismo para preparar una para mi marido para llevar al trabajo mañana. También algunos de los espárragos los voy a usar en una pasta que me voy a inventar para cenar, ya os contaré qué es :)

viernes, 20 de marzo de 2015

Ensalada de espinacas con vinagreta templada de bacon


Hoy una idea para una ensalada de lujo: espinacas frescas, con huevo duro y una vinagreta balsámica de bacon. Hay un programa de televisión que me encanta que se llama Pioneer Woman. Los Pioneers eran en Estados Unidos aquellos atrevidos que se aventuraban más al oeste de lo conocido, haciendo nuevos asentamientos en la "conquista" de estas tierras. Los pioneers no eran conquistadores, no peleaban por las tierras, simplemente iban abriendo camino hacia el oeste, eran los que se hacían la casita un poco más allá del último europeo. Para mí es una imagen muy poderosa el de las familias que se aventuraban a ese tipo de soledad, y al mismo tiempo me imagino la belleza de los sitios donde iban asentándose como lo que me evoca el dicho "America the beautiful". Eran los primeros no-nativos en vivir ahí, en conocer esas tierras y lo que tenían que ofrecer, vivían con muy poco y no se podían permitir depender de otros asentamientos, ellos tenían su propio ganado, o hacían sus propios campos... Me imagino las vidas de esas familias casi como un ideal, en el que cada miembro tiene un papel muy importante, ya que sólo se tienen los unos a los otros, a veces familias aisladas, o como mucho en asentamientos muy pequeños de varias familias. Pioneer signifca pionero, pues eran los pioneros en ir hacia el oeste, pioneros en todo. 

Bueno, este programa de televisión me encanta en el mismo sentido, es esa imagen bucólica que se me creaba al estudiar la historia y literatura de este país. La mujer del programa, Ree Drumond, es una chica del sur, que estudió periodismo en California y que se casó con el perfecto cowboy, un chico de Oklahoma heredero de una familia importante de ganado. Como ella dice, es una chica de campo por accidente, y también es una idea muy romántica <3  En la cabecera del programa sale una introducción a quien es ella y cómo vive: en un rancho enorme en "el medio de la nada" donde tiene que encargarse de las cosas de la casa y dar de comer a niños y cowboys. Lo pinta tan bonito que por un momento me convence de que me quiero mudar a un rancho en el medio de la nada, y convertir a mi marido en un cowboy :-)

Además de encantarme esa imagen ideal que representa, me fascina que hace sólo unos años empezó un blog porque necesitaba hacer algo más con sus días y ahí plasmaba su vida diaria en el rancho y subía sus preciosas fotos del día a día. El blog tuvo tanto éxito que en solo un año consiguió el premio más prestigioso del país, tenía millones de visitas, empezó a escribir libros de cocina, luego vino el programa con Food Network y ahora es una de las personalidades de cocina más conocidas del país. He leído que sólo de la publicidad en su web estiman que ingresa más de 1 millón de dólares al año!


Su cocina es muy sencilla, cosas con una muy buena pinta, ingredientes muy corrientes que tenemos cualquiera (dijo que va al supermercado una vez al mes cuando van a la ciudad) y sobretodo unas carnes estupendas del mismo rancho. En esta receta de una ensalada templada, el bacon que ella usa parece sacado.... bueno, claro... de un programa de cocina donde la carne es la estrella. Yo lo he hecho con bacon normal y con bacon de pavo. No será lo mismo, pero queda muy rico también.

Esta es mi adaptación de su receta, me quedé con la idea y luego cada vez lo hago un poco diferente. Lo importante: el bacon, la mostaza y el pelín de azúcar.

Tiempo: 5mins                                Raciones: 4

Ingredientes:
Espinacas frescas
3 huevos duros
5-6 lonchas de bacon
vinagre (puede ser balsámico, puede ser de vino tinto y balsámico)
cognac opcional
una cucharadita de azúcar
un cucharada grande de mostaza dijon

1. En una ensaladera grande ponemos las espinacas lavadas y secas, y sobre ellas cortamos el huevo en rodajitas.
Ella el bacon lo corta en tiritas, y lo hace en una sartén y reserva parte de la grasita de hacerlo para hacer la vinagreta. Yo lo corto y lo pongo en el microondas (1 minuto por loncha) y en la sartén uso aceite de oliva. Me parece una versión algo más saludable :) Sacamos el bacon de la sartén para hacer la salsa.

2. En la sartén con el aceite o la grasa del bacon añadimos el cognac si usamos, el vinagre, removiendo, ponemos el poquito de azúcar, la mostaza y removemos a fuego muy bajo durante un minuto. Si necesita más líquido ponemos más aceite y más vinagre a partes iguales. Regresamos el bacon a la sartén, le damos una vueltecita y enseguida lo vertemos sobre la ensalada para que esté aún calentito.

También se puede pochar un poquito de cebolla morada cortada muy fina y se añadiría a la ensalada antes de hacer la vinagreta templada.

Esta receta la podéis ver acompañando mis crepes rellenos de espinacas, champiñones y maíz, y también con mi pollo al limón.

Crepes con maiz, espinacas y champiñones

Hoy os traigo la receta que hice anoche y que me encantó: unos crepes rellenos de una crema con queso, espinacas, maíz y champiñones. Hacer crepes es en realidad muy fácil, no hay que tenerles miedo, y lo peor que puede pasar es que no salgan super bonitos, pero aún así saldrán igual de ricos, porque en sí el crepe no tiene sabor al ser solo harina y leche. Yo usé una sartén de las grandes, de esas lacadas en blanco por dentro. Todos tenemos nuestra sartén "infalible" en cuanto al pegarse las cosas, pues esa sirve sea del tamaño que sea.

La técnica para hacer un buen crepe es sencilla, el truco es no echar mucha masa, echarla en el centro de la sartén y levantarla completamente del fuego para irla girando e ir formando el crepe, si no es masa suficiente mejor que si es demasiada masa, porque podemos echar una cucharada y seguir con nuestro movimiento circular cubriendo toda la superficie. Incluso si nos hemos quedado cortos por un poquito y vemos que no va a quedar un círculo perfecto le podemos "manchar" esa zona con la espátula con masa. No se notarán las distintas añadiduras una vez esté completo :) También es importante que la sartén esté bien caliente, pero no ardiendo para que se haga por igual. Sabremos cuando está listo para darse la vuelta porque ellos solo será fácil de despegar de la sartén y tendrá un bonito color dorado. Al darle la vuelta lo único que queremos es que se dore ese segundo lado, así un minutito será suficiente. El segundo lado nunca se pega, así que podemos ir mirándolo de vez en cuando hasta que esté bonito :) No hace falta poner mucha mantequilla, media cucharadita de café sirve, aunque no veamos que haya llegado a cubrir toda la superficie.



Aquí va la receta de cómo hacer esta masa de crepes muy sencilla que vale lo mismo para dulce que para salado (es lo bueno de los crepes, que valen para todo, mi marido cuando le dije "mañana para cenar voy a hacer crepes" sólo se sorprendió porque él pensaba que los crepes sólo eran dulces, "con nutella" dijo. Pero ya sabemos que la mayoría de los americanos no tienen así como una cultura super extensa :) bastante que sabía lo que era un crepe!). Y también la receta de este relleno con un sabor muy suave y que es vegetariana.

Tiempo: 30mins +gratinar 5mins                            Raciones: 6 crepes

Masa de crepes:
1 taza de harina
1.5 tazas de leche
1 huevo

Relleno:
5 cucharadas de mantequilla
2 cucharadas de harina
100gr de champiñones limpios y laminados
1.5 tazas de leche
2 tazas de espinacas frescas
1 taza de maíz
2 tazas de queso tipo suizo, emmental...
sal y pimienta

1. Para la masa de crepes: en un bowl mezclamos perfectamente los ingredientes y lo dejamos reposar 15 minutos. En ese tiempo podemos hacer los champiñones, pondremos en una sartén grande una cucharada de mantequilla, la derretimos y ahí pochamos los champis durante unos 7-8 minutos hasta que estén muy hechos. Los retiramos, limpiamos la sartén con un papel de cocina, y ponemos las 4 cucharadas restantes de mantequilla a fuego medio. Cuando esté derretida mezclamos bien la harina con ello, y la doramos unos 2-3 minutos. A continuación añadimos la leche, removiendo vigorosamente. Esto es como hacer una bechamel, y a mí siempre se me empiezan formando grumos parece que no se va a mezclar la harina con la leche porque tiene pegotitos, pero si le damos bien con unas varillas veremos que en realidad se van desintegrando y según pasan un par de minutos removiendo, no hay grumos y se va espesando. Removemos de vez en cuando hasta que esté espesito, en total unos 3 minutos. Sal pimentamos al gusto.

2. Añadimos a la bechamel las espinacas, el maíz y los champiñones y lo removemos bien. Tapamos y dejamos a fuego medio-bajo para que las espinacas se hagan. Mientras podemos ir empezando los crepes. No deben ser 15 minutos justos, si son 20 no pasa nada, pero es importante que repose un ratito. Para hacerlos es muy sencillo como digo, simplemente calentamos la sartén a fuego medio-alto, untamos un poquito de mantequilla y cuando esté caliente echamos un par de cucharadas de masa. Lo vamos girando alejado del fuego para que se vaya cubriendo todo, y vamos añadiendo más según necesitemos. En cuanto hayamos hecho un par de ellas sabremos cuanto hay que echar, pero es mejor quedarse corto que echar mucho y que salga un pancake en vez de un crepe!

3. Una vez las espinacas están hechas, incorporamos una taza de queso rallado, removemos y retiramos del feugo. Mientras vamos terminando nuestros crepes y los vamos poniendo en un plato grande uno sobre otro. Para terminar, los pondremos en una fuente de hornear para gratinarlos. Debemos colocar el crepe de manera que haya un cuarto de crepe reposando en el fondo de la bandeja, donde pondremos 3 cucharadas de relleno, y así con el resto del crepe lo doblaremos haciendo una forma triangular. Doblamos primero un lado, y después el otro, quedando la forma de un cuarto del círculo. Vamos rellenándolos y doblándolos todos en la fuente.

4. Espolvoreamos el resto del queso rallado por encima y lo metemos a gratinar unos 5 minutos, pero vigilamos que no se queme, que cada horno es distinto! Y a disfrutar de esta delicia francesa, ideal para un "meatless monday" o "lunes sin carne".
 


lunes, 9 de marzo de 2015

Curry rojo con gambas y raíz de loto

Esta receta puede ser una buena idea para darle más uso si os hacéis con un botecito de pasta de curry rojo. Ya os contaba que lo que más me gusta de Estados Unidos es que en el super "normal" encontramos cositas de todos los rincones del mundo, y sin duda la pasta de curry rojo la podemos encontrar en prácticamente todos los supermercados. La verdad es que es muy fácil crear una receta asiática con ella, ya que simplemente se acompaña de una lata de leche de coco y podemos poner lo que queramos, como pescado en una de las primera recetas que compartí aqui, o sólo verduras como judías verdes, zanahorias, patatas... o como hice yo el otro día, con gambitas y verduras.


Aquí está la pasta de curry rojo que os decía que podeis encontrar en España en El Corte Inglés. Pero en foros he leído que lo empiezan a tener en Carrefour, Eroski y hay gente que dice que también mercadona. Para que no os confundais, esto no tiene nada que ver con el curry al que estamos más acostumbrados. De hecho, la pasta de curry rojo no lleva esa especia! es una mezcla de especias, que tiene muchisimo aroma y por eso se usa siempre en poca cantidad. He visto que en España venden la salsa ya hecha, fenomenal, y también la pasta como la uso yo para hacer nosotros la salsa. Esta es la que uso yo:

http://www.thaikitchen.com/Products/Sauces-and-Pastes/Red-Curry-Paste.aspx
Para usarla siempre hay que sofreirla un poquito antes de añadir ningún liquido, así se desarrolla el aroma que debe tener. A mí me encanta y no vale mucho, me parece una cosita interesante para probar cosas nuevas.

La raíz de loto fue un capricho. El viernes venian amigos a cenar a casa e íbamos a hacer una barbacoa koreana (os pondré una entradita con ello, pero no es muy fácil de recrear en casa si no tenemos las cosas ya preparadas koreanas...) así que fui de excursión al supermercado koreano que pilla a media hora de mi casa, pero tienen tantas cosas divertidas que me gusta ir de vez en cuando. Una de las cosillas curiosas que compré es la raíz de loto. El loto es esa flor tan bonita que crece en los estanques y su raíz es realidad una especie de tubérculo, imaginaos una patata alargada como de 10cm de largo, y que por dentro tiene muchos agujeritos que van de un extremo a otro. Por eso el corte en discos queda tan bonito y es tan único, paracen flores hechas con discos de patata. En cuanto a sabor, bueno, no sabe a nada, es como una patatilla en realidad, tiene un sabor un pelín dulce, se queda blandita si la cueces, crujiente si la fríes, enseguida se pone marrón cuando lo pelas o lo cortas... Una patata exótica :-) para que no se ponga marrón el truco es ponerla en agua con vinagre. Seguramente valga también para cuando preparamos patatas.

Bueno, pues fue la raíz de loto la que me dió la idea de hacer este plato muy muy sencillo del que podemos hacer mil variantes. Compré dos raíces, una la usé para hacer chips que me encantan, y la otra para este curry de inspiración tailandesa, aunque es en india donde más se usa. Vamos con la receta:

Tiempo: 20 mins                                                     Raciones: 4

Ingredientes:
1 cucharada de pasta de curry rojo
aceite de oliva
1 lata de leche de coco
1 raíz de loto o una patata grande en trozos
3 zanahorias en discos
3 tazas de tirabeques (guisantes en su vaina que se pueden comer enteros, si no los tenemos guisantes sueltos o judías verdes planas)
3 tazas de gambas limpias y peladas
sal
arroz blanco para acompañar

1. En una sartén o wok calentamos un poquito de aceite de oliva a fuego medio-alto. Añadimos el curry y lo revolvemos con una espátula, veremos que se derrite un poco, que da mucho color al aceite, y que empieza a oler a especias. Le damos vueltas un minuto y añadimos la leche de coco. La removemos bien si tiene la crema separada del agua (yo soy incapaz de agitar la lata suficiente como para mezclarlo).

2. Echamos las verduras cortadas en trocitos y dejamos cocer con la tapa puesta unos 20 minutos hasta que las patatas o el loto estén blanditas. Echamos las gambitas y dejamos destapado a fuego medio-alto hasta que se hagan, unos 7-10 minutos. Lo serviremos sobre arroz blanco.




Marmitako en la slow cooker

Sigo usando mi preciosa slow cooker de Bella estos días para subir más recetitas aquí y a mi grupo de Facebook "Cocina Lenta: recetas con Slow Cooker". Siempre os invito a probar esta maravilla de olla de cocción lenta, pero también os digo que lo mismo se puede hacer en olla convencional. Para mí los guisos salen más ricos en la slow porque las salsitas siempre cogen más cuerpo, igual que las carnes, que salen sin comparación en cuanto a tiernas y jugosas.

El de hoy, que hice ayer, es un guiso con un sabor muy español :) básicamente hacemos un sofrito y lo ponemos en la slow cooker con patatas para que se hagan muy lentamente. Al final de la cocción añadimos el pescado y está listo para servir. El pescado no se podría tener todas esas horas en la slow cooker, por eso vemos menos recetas con pescados que con carnes, pero en realidad, no es más difícil ni tiene peores resultados, simplemente debemos estar ahí para incorporarlo y esperar para servirlo. A mi marido no le gusta mucho el pescado, y sin embarago este marmitako le encantó, decía que no sabía a pescado, si no a guiso rico. Así que si funciona con él, seguramente tengais éxito con los niños :-)





Vamos con la receta, como la hice yo ayer, espero que ningún vasco se ofenda, ¡así es como una madrileña hace un marmitako en Maryland!

Tiempo: 10mins prep 6.5 horas low                               Raciones: 4

Ingredientes:
300gr de atún fresco
300gr de bacalao fresco
6 patatas grandes en trozos
2 tazas de caldo de pescado o agua de almejas
1 cebolla picada
1 pimiento rojo picado
1 pimiento verde picado
3-4 dientes de ajo picado
una pizca generosa de pimentón
aceite de oliva
sal

1. En una sartén ponemos a calentar el aceite con la cebolla a fuego medio, añadimos el pimiento y dejamos pochar, removiendo de vez en cuando unos 10 minutos hasta que esté todo blandito, añadimos el ajo, el pimentón y un poco de sal, removemos hasta que esté dorado, un par de minutos.

2. Ponemos las patatas troceadas en la cacerola y cubrimos con el caldo y el sofrito, removemos para combinar. Si es una olla de cocción lenta lo dejamos tapado a 6 horas en low. Si es una cacerola convencional, lo dejamos a fuego bajo hasta que las patatas estén tiernas. En ese momento vamos a incorporar los pescados en trocitos, mezclamos suavemente, tapamos y dejamos unos 20 minutos hasta que esté cocinado. Y ya está listo para servir.

domingo, 8 de marzo de 2015

Hotcakes o tortitas de arándanos

Una recetilla fácil fácil para un desayuno o merienda: hotcakes de arándanos. He querido poner Hotcake en el título como curiosidad, porque hotcake es simplemente otra manera de llamar a las archiconocidas pancakes o tortitas americanas. En México parece ser que prefieren éste término, al igual que en el sur de Estados Unidos, pero básicamente es lo mismo :-) aunque suena más apetitoso, ¿no creeis?


Ya sabeis que en casa nos encantan los arándanos o blueberries, y no me importa gastarme un poquito más en ellos ahora que no están de temporada porque al traerlos de sudamérica están en su punto perfecto, y es una fruta llena de vitaminas y antioxidantes. Merece la pena. Aunque si no los tenemos verdaderamente podemos poner casi cualquier fruta, como trocitos de fresas, de mango, podemos quitar media tacita de leche y poner media taza larga de compota de manzana o pera con un poquito de canela, también las he hecho con puré de calabaza y canela.... Estas son las que hice el otro día para celebrar que mi peque se levantó a las 6 de la mañana y tenía 3 horas para hacer el desayuno antes de que mi marido saliera a trabajar. Pero se necesitan como 15 minutos.... el resto nos lo pasamos dando sorbitos al café y disfrutándolas. El peque se comió 4, no digo más de lo ricas que estaban con sirope de arce...


Tiempo: 15-20mins                                      Raciones: 8 tortitas

Ingredientes:
2 huevos
1.5 tazas de harina
1/2 taza de azúcar
1 taza de leche
3 cucharaditas de levadura
1 cucharadita de vainilla
mantequilla
arándanos

1. Simplemente mezclamos todos los ingredientes de la masa hasta que no hay grumitos. En una sartén que no se pegue ponemos una cucharada de mantequilla y la derretimos a fuego medio-alto. Cuando esté derretida y caliente echamos un cacito de la masa y enseguida ponemos un puñadito de arándanos por encima. Tapamos y vigilamos cuando esté casi cuajado, como 1-2 minutos, con una espátula le damos la vuelta y lo dejamos dorar otro medio minuto o un minuto dependiendo cuánto de cuajado estuviera.

2. Repetimos con el resto de la masa poniendo un poquito de mantequilla entre cada tortita. Servimos calentitas con sirope o nata o ambos :)

Gratin de calabaza y patata en la slow cooker

Hoy os traigo una receta que se puede hacer al horno o en la slow cooker, un gratin muy rico de patata y calabaza. Yo usé la calabaza de cacahuete, que ya sabéis que es la más popular por aquí, es sinónimo de otoño, de sopas calentitas, de postres, de guisos con mucha verdura... A mí me encanta, pero la podemos substituir tranquilamente por otro tipo de calabaza. Un truquito para que sea más fácil cortarla, ya que va en láminas, es meter la calabaza entera en el microondas durante 1-2 minutos. Yo la puse minuto y medio y pude cortar la parte más fina sin problema, luego corté una rodaja de unos 5cm de la parte más gordita y la puse otro minuto en el microondas para poder hacer láminas finas fácilmente.

Esta receta la he sacado de mi libro The French Slow Cooker, que tiene muchas ideas para entrantes vegetarianos o guarniciones elaboradas, como esta receta. Si no tenemos este tipo de olla de cocción lenta lo podemos hacer en una bandeja mediana de horno y hornearlo durante unos 45mins a 200-220ºC, hasta que lo pinchemos con un cuchillo en el centro y notemos todas las capas blanditas. Os recomiendo darle una oportunidad a la olla lenta, ya que se está poniendo de moda en Europa y en España, y es más fácil de encontrar, especialmente en Amazon. Las hay también en los amazon de uk, de francia, de alemania (de donde le compré a mi madre la suya hace unos años)... Y la variedad es estupenda, no sólo en marcas y prestaciones (con temporizador o sin él, por ejemplo) si no en cuanto a capacidades, las hay pequeñitas para hacer poco más que dips para fiestas o fondue, las hay de entre 5 y 6.5 litros que están muy bien para guisos y comidas para una familia de 4, aquí las más "normales" son las de 6-6.5 litros, esa es la medida standard, pero aquí igual que en Europa las hay incluso más grandes, de 8 litros, que dan juego para cosas con mucho caldo. Aquí están sacando cada vez más modelos para fiestas, para preparar varios platos al mismo tiempo y presentarlos estilo buffet ya que mantienen la comida caliente, como esta en la que podemos hacer tres guarniciones diferentes, o esta en la que podemos presentar tres dips diferentes.

Algunos recelan de la seguridad de este aparato, pero os aseguro que el rieso es mínimo. Nunca he oido de ningún accidente con ella, ni de gente que la use, y aquí la usa absolutamente todo el mundo, ni en las noticias. Y como siempre digo, los españoles no dejamos de usar las ollas express y de esa olla sí que hemos oido historias terroríficas tanto de gente que conocemos como en las noticias. Parte de la seguridad de la olla de cocción lenta es que no hay que no hace falta saber cerrarla ni prestar atención a ninguna seguridad, simplemente se le pone la tapa como a una cacerola convencional y se deja que haga el trabajo por nosotros, si llegamos una hora tarde a por la comida, no hay problema más que estará más sequito, pero al mantener una temperatura baja es virtualmente imposible que nada salga ardiendo. Otra de las preguntas que he oido es acerca del consumo eléctrico ya que está conectada muchas horas. Para que os hagais una idea, sería como dejar una lámpara de noche encendida con una bombilla de unos 60W. Mientras que si ponemos el horno una hora a 200ºC consumimos más que durante 8 horas la slow cooker. También las vitrocerámicas o inducción son equiparables a su consumo durante el tiempo que estamos cocinando en ellas. Así que animaos, ¡que verdaderamente no tiene ningún punto negativo!

Ahora, vamos con la receta del gratin muy fácil:

Tiempo: 10mins prep  6horas low/45mins horno                           Raciones: 4-6

Ingredientes:
500g de calabaza cortada en láminas de 3mm de grosor
1kg de patatas cortadas en láminas de 33mm de grosor
1/3 taza de caldo de pollo
1 taza de queso rallado (yo usé parmesano y monterrey, también se puede usar un gouda o un emmental)
sal y pimienta
mantequilla

1. Untamos de mantequilla la cacerola o la bandeja de hornear y comenzamos por poner un tercio de las patatas extendidas homogéneamente por el fondo. Cubrimos con un tercio de la calabaza. Espolvoreamos con sal y pimienta, y un tercio del queso. Vertemos el caldo por encima. Ponemos unos 6 puntitos de mantequilla repartidos por la superficie. Repetimos con otro tercio de las patatas, otro tercio de la calabaza, otro tercio del queso, salpimentamos, ponemos mantequilla, seguimos con las últimas patatas, últimas rodajas de calabaza, salpimentamos y reservamos el último tercio del queso.

2. Lo dejamos cocinar 6 horas en low o 3 en high. O lo metemos en el horno precalentado por unso 45 minutos hasta que esté todo tierno al pinchar con un cuchillo. Pasado el tiempo, cubrimos con el queso reservado, tapamos y dejamos que se derrita unos 15 minutos. O lo ponemos con el grill en el horno si lo estábamos usando.

Queda muy bien acompañando carnes o como hicimos nosotros unas pechugas de pollo con mucho sabor: con limones, tomates, vino blanco y albahaca.

jueves, 5 de marzo de 2015

Calamares "Nicoise" en la slow cooker con pasta

Esta receta me ha gustado mucho, y menos mal, porque he sido la única que la ha comido en casa, ya que a mi marido no le gustan los calamares... Pero está tan rica que me la he comido yo todita.

He sacado la mayor parte de la receta de un libro estupendo que tengo que se llama The French Slow Cooker, lo malo de las recetas es que la mayoría necesitan algunos pasos de preparación antes de ir a la slow cooker (esa olla de cocción lenta que os recomiendo siempre probar, y para la que he creado un grupo en Facebook llamado Cocina Lenta: Recetas con Slow Cooker), pero bueno, si queremos comer "francés" normal que no cueste un poco de elaboración, aunque sólo sea dorar la cebolla :-)



Aquí por algún motivo cuesta mucho encontrar calamares. De hecho, no los había encontrado hasta la semana pasada. Siempre os comento que en esta zona de la Costa Este lo más típico es el pescado y el marisco, pero aún así no hay cultura de comer calamar, y creo que tampoco es que sea zona de pesca. Aunque lo cierto es que luego el calamar gusta porque en los restaurantes italianos y muchos bares con buen menú de apertivos siempre tienen calamares fritos sea con rebozado o empanado. Pero bueno, el otro día en un supermercado de aquí cerca descubrí que tienen una sección estupenda de productos congelados con varios tipos de calamar, con pulpo... Así que haré más cositas, me he estrenado con este plato de mi libro de slow cooker, pero veréis que se puede hacer en una cacerola o sartén honda perfectamente, mirando cuando están hechos y blanditos los calamares.


Tiempo: 10mins prep  2hr15mins slow cooker 10mins cocción               Raciones: 4

Ingredientes:
1kg de calamares enteros limpios (o anillas, a mí me gustan las patitas también)
aceite de oliva
3 dientes de ajo picado
1 cebolla cortada fina
3 tazas de tomates troceados o una lata grande de tomates en dados
2/3 vaso de vino blanco
sal y pimienta
1/2 taza de aceitunas negras picadas
1 pizca de pimentón

1. En una sartén calentamos el aceite de oliva y ahí pochamos la cebolla y doramos el ajo, durante unos 5 minutos a fuego medio hasta que esté blandito. Entonces pondremos los tomates con todo su jugo y el vino, salpimentamos y llevamos a ebullición.

2. Ahora ponemos los calamares cortados en la slow cooker,  y cubrimos con la salsa de la sartén, removiendo para mezclarlo bien. Tapamos y dejamos cocinar en low 2 horas. Si lo hacemos en una cacerola convencional, seguramente sea menos tiempo, debemos mirar cuándo estarían blanditos.

3. El libro decía que hay que incorporar las aceitunas y el pimentón ahora y dejarlo cocinar 15 mins más y después servir acompañando pasta. Pero yo hice otra cosa: puse espaguettis en una sartén grande y cubrí con los calamares y la salsa (era mucha salsa), puse las aceitunas, el pimentón, lo tapé y lo dejé a fuego medio en una ebullición bajita durante 10 minutos hasta que la pasta estaba al dente. Me encanta esta idea de hacer la pasta en la misma salsa que la acompañará porque queda llena
del sabor del plato. En este caso además la salsa cogió mucha consistencia y quedó todo en su punto. Os recomiendo probar esta "técnica" con algúna receta de pasta que la salsa sea caldosita. 

miércoles, 4 de marzo de 2015

Pera-Manzana otra fruta "curiosa"

Hoy os enseño otra cosilla curiosa de por aquí. No lo había visto nunca y me "atreví" a comprarlo -no hace falta ser muy valiente- a ver qué tal salía. Se trata de una pera con híbrido de manzana. Debe ser que sale del peral más que del manzano porque técnicamente se llama "pera". Las manzanas se llaman Gala Apple, o Fuji Apple, las peras se llaman Bosc Pear, o D´Anjou Pear... Esta se llama Apple Pear y está por supuesto hecha en USA.

Por fuera eran feuchas, pero tienen la forma de una manzana típica, como las Golden, redonditas. La piel es bastante rugosa con la de muchas peras, y la carne tiene la textura justo intermedia entre una manzana suave y una pera jugosa. De sabor...... bueno..... no sabe a nada. Pero lo importante es participar :-)


martes, 3 de marzo de 2015

Canelones de carne

Esta receta de canelones de carne la he hecho este fin de semana, cuando he tenido tiempo de meterme en la cocina y disfrutar cocinando una cena rica-rica aunque un poco laboriosa. El resultado ha merecido totalmente la pena y por eso os animo a hacerlo si os gustan los canelones o para alguien a quien le gusten como a mí. La receta es de una amiga mía del grupo de cocinillas españoles en Estados Unidos, Sonia Miles, una mamá 10 de cuatro niños de menos de 5 años -¡y no se vuelve loca ni nada!- les hace una comidas increibles, y además les hace unas tartas de escaparate, sólo por entretenerse... Pues estos son los canelones que hace para su familia, y que yo he hecho para la mía este domingo. A ver quien más se anima a hacerlos.




Lo único es que me gustan con mucha bechamel y me salió justa para cubrirlo. El relleno queda un poco sequito, no es el típico con mucha salsa como los de tomate, me hubiera gustado más bechamel, pero a mi marido le gustó tal cual estaba... para gustos, la comida. Con estas medidas salen dos fuentes de canelones como para 4 raciones buenas cada una.

Tiempo: 2 horas activo 20horno                              Raciones: 8-10

Ingredientes:
Pasta de canelones
500gr Ternera picada
500gr Pollo picado
500gr Cerdo picado
250gr Foiegras
1 Cebolla
1 taza de vino blanco
2 o 3 dientes de ajo
sal & pimienta negra molida
1 cucharada de orégano

•Para la bechamel (hice dos tandas como esta:)
3 cucharadas de mantequilla
4 cucharadas de harina
2 tazas de leche Entera
1 cucharadita de nuez moscada
Sal


1. En una cacerola grande ponemos un poquito de aceite de oliva y doramos el ajo cortado muy fino durante un minutito. Añadimos las carnes, rompiéndolas con una cuchara de madera y mezclándolas bien. Salpimentamos y añadimos el orégano. Lo dejamos a fuego medio-bajo con la tapa puesta durante una hora, removiendo y rompiéndolo de vez en cuando con la cuchara. Destapamos, añadimos 1/2 vaso de vino y dejamos que reduzca el juguillo, una media hora. Seguimos removiendo de vez en cuando para que la carne se dore por igual.

2. En una picadora ponemos la cebolla cortada en pedazos y trituramos fina. Añadimos a una sartén grande donde quepa la carne picada, con un poquito de aceite de oliva y doramos un par de minutos. Mientras, vamos sacando la carne de la cacerola y picándola en la picadora para que quede muy fina. La vamos incorporando a la cebolla pochadita. En este punto la carne ya está cocinada, así que podemos probarla para corregir de sal, pimienta, orégano, lo que haga falta. Añadimos el medio vaso de vino blanco restante y el foigras o paté, lo mezclamos muy bien con la cuchara de madera, viendo que el paté se funde con la carne. Lo dejamos cocinar otra media hora, removiendo de vez en cuando hasta que tenga la consistencia deseada. (yo le eché media taza de leche en este punto porque estaba un poco seco al no llevar todo el foi que necesitaba...)

3. Mientras la carne se hace podemos ir cociendo la pasta de canelones y sacando a escurrir sobre un trapito limpio. Cuando la carne esté lista, simplemente rellenamos los canelones, cerrándolos hacia abajo. Como Sonia, recomiendo una cucharada sopera bien colmada para cada canelón. (me sobraba carne y no pasó nada, con una cucharita, fui rellenando por el ladito los canelones ya cerrados)

4. Una vez los tenemos todos listos, hacemos la bechamel y ponemos el horno a calentar a 200ºC. Para la bechamel usaremos una sartén grande que no se pegue, pondremos el fuego medio, y derretiremos las 3 cucharadas de mantequilla hasta que esté muy caliente. Entonces echamos las 4 cucharadas de harina, incorporándola muy bien con unas barillas, removemos unos minutos para dorar la harina. Vertemos la leche, poquito a poquito, removiendo vigorosamente con las varillas para que no haya grumos. Ponemos la nuez moscada, un poquito de sal y si queremos, un poquito de pimienta negra. Vamos viendo si queda espesa, podemos echar más leche hasta que tenga la consistencia deseada, que es mejor que vaya bastante líquida, pues va al horno y espesa más. Lo vertemos sobre los canelones homogéneamente, y lo metemos al horno unos 10-15 minutos, para después poner el grill y dorarlos por encima unos 5 minutos, vigilando que no se quemen.



¡Deliciosos!

Bizcocho de limón, yogur y arándanos

Hoy os traigo una receta dulce. Me estoy animando a hacer más bizcochos porque a mi peque ya le van gustando y me ayuda a comérmelos :) El otro día hice uno de naranja que le encantó, así que cuando ví la receta de este supe que le iba a gustar ya que tiene un buen toque de limón y su cosilla favorita: arándanos. Sé que no siempre o no en todas partes se encuentran arándanos, no pasa nada, los arándanos son casi como un adorno. Quizá se puedan substituir por trocitos de fresas que hayamos secado con papel de cocina bien, o no poner nada y dejarlo como un delicioso bizcocho de limón y yogur griego. Aquí tenemos arándanos, moras, frambuesas, fresas... todo el año, es una maravilla, durante el verano son más locales, los arándanos vienen de Nueva Jersey o de Nueva Inglaterra, las fresas son de aquí mismo de Maryland donde hay mucha cosecha de fresas y en junio hay muchos festivales locales dedicados a las fresas. Pero cuando no son locales vienen de México o incluso de Chile y aún tienen el mismo precio que las locales.


Los arándanos son especialmente ricos en antioxidantes, así que si os podeis hacer con una cajita, es buena cosa para hacer batidos, o madalenas, llenos de vitaminas y antioxidantes. A nosotros nos gustan mucho, y al peque le dura una cajita unos 5 minutos, se sienta con ella, y hasta que no se la acaba no para. ¡No ganamos para fruta, pero nos lo ahorramos en médicos!

Pues aquí va el bizcocho que hice ayer, con las medidas que yo usé, que fui más liberal con el limón y otras cosillas que la web de donde lo saqué:

Tiempo: 5mins de prep.   40mins de horno                          Raciones: un bizcocho redondo

Ingredientes:
1.5 tazas de harina
2 cucharadas de harina
3 cucharaditas de levadura en polvo
una pizca de sal
1 taza de azúcar
1/2 taza de aceite vegetal
1 cucharadita de vainilla
3 huevos
1 yogur griego natural
1 limón
1 taza de arándanos

1. Precalentamos el horno a 200ºC. Mezclamos la taza y media de harina con la levadura y la sal (idealmente pasaremos los ingredientes juntos por un colador para airearlo, mezclarlo bien y eliminar cualquier grumito, pero el mio se me rompió y simplemente con un tenedor lo aireo y lo mezclo a mano en una ensaladera grande). Lo reservamos.

2. En un bowl grande o en una maquinita tipo KitchenAid batimos el azúcar con el aceite hasta que esté bien incorporado. Añadimos los huevos, rallamos el limón entero, y exprimimos todo su jugo, añadimos también la vainilla y batimos bien. Ahora vamos a incorporar el yogur y la harina, en dos tandas alternando los ingredientes, hasta que esté bien incorporado, pero sin pasarnos de batir para que no quede apelmazado.

3. En un cuenco ponemos las 2 cucharadas de harina con la taza de arándanos limpios y secos y los recubrimos bien meneando el cuenco. Los añadimos a la mezcla y con una espátula o cuchara sopera los repartimos bien por la masa sin remover mucho.

4. Lo ideal son los moldes que tienen un resorte para abrir y desmoldar fácilmente, los que se usan para cheesecakes y cosas así. Pero si no tenemos, simplemente vamos a untar de mantequilla un molde redondo grande (porque sube bastante) y ahí echamos la masa. Horneamos unos 40 minutos, hasta que esté dorado y al meter un palillo en el centro salga seco. Para desmoldar el de resorte es ideal, pero aún así es bueno pasarle una espátula todo alrededor para asegurarnos de que no se ha pegado. También a base de espátula lo sacaremos de un molde convencional. Pero no se pega, no tengais miedo, porque a mí no se me pegó, sólo le pasé la espátula y me aseguré y salío solo.

¡A disfrutar de una merienda sana y natural aunque dulce!

!

lunes, 2 de marzo de 2015

Pasta tailandesa

Hoy hemos cenado una pasta de inspiración tailandesa que estaba para chuparse los dedos. De las mejores cosas que hemos hecho últimamente y con diferencia. Como cocinamos bastante asiático tenemos la salsa de pescado de la que ya os hablé en otro post sobre ingredientes asiáticos. Es una salsa curiosa, porque no sabe a pescado en absoluto pero le da un toque casi ahumado, le da ese "algo" que lo hace auténtico. Pero si no la teneis y no os quereis hacer con ella porque pensais que no la vais a usar, no hay problema, como siempre digo, compensa probar algo nuevo aunque no sea totalmente la receta al pie de la letra. El resto de los ingredientes son fáciles de encontrar y muchos los tendréis ya por casa. Los ingredientes pueden parecer un poco extraños combinados, pero el cacahuete se usa muchísimo en la cocina tailandesa, así como el cebollino, el gengibre y el toque picante. Así que esta receta lo reúne todo y el resultado no puede estar más rico, ¡hasta a mí me ha sorprendido!

Sí que os recomiendo usar manteca de cacahuete, sin ella no va a tener la consistencia deseada, y al ser semi-salado semi-dulce va muy bien para cocinar. Y luego lo que os sobre pues en tostaditas, lo podeis poner con plátano, con mermelada, con manzana... Muy americano, con mucha proteina y llena bastante.


Aquí va la receta que encontré en un post de cenas que se hacen en una sola cacerola donde ponemos todo al mismo tiempo. Un inventazo, fijaos en el tiempo:

Tiempo: 5mins prep  12mins cocción                             Raciones: 4

Ingredientes:
300gr de pasta tipo espaguetti
350gr de gambas peladas y limpias
3 tazas de caldo de pescado
3cm de jengibre
3 dientes de ajo
4 cucharadas de cebollino cortado
2 zanahorias ralladas
1 cucharada de manteca de cacahuete
1 cucharada de miel
1 cucharada de salsa de soja
1 cucharada de salsa de pescado
1/2 cucharadita de cayena o chile picado

Adornos:
lima, cacahuetes, brotes de soja, salsa sriracha...

1. En una cacerola grande ponemos todo junto y lo llevamos a ebullición, bajamos el fuego para hierva suave. Removemos de vez en cuando los espaguettis y cuando la pasta esté lista y la salsa haya espesado, ¡la cena está lista! A mí me gustó ponerle unas gotitas de lima porque me pasé un poco con el picante :)